Cuando los entrenamientos pasan a ser los protagonistas de tu día a día

Tras la visita de Carlos a Galicia comienza una nueva etapa, para mí, la más difícil hasta ahora.

La de compaginar los entrenamientos con los preparativos del viaje a Maui. Bien por jaleos de papeles, billetes, reservas, busca de patrocinadores que soporten en parte nuestro viaje, nuestro día a día, se ha convertido en una lucha para encontrar o compaginar todo esto con unas horas de sufrimiento diario.

Alguno pensará: como les gusta quejarse, el día tiene 24 horas. Cierto, pero la cantidad de cosas que hay que hacer durante este tiempo se llevan toda la energía y cuando realmente te pones a nadar, pedalear o correr, no consigues que se vayan de tu cabeza y te dejen hacer tu entrenamiento de forma óptima.

Todo tiene su trabajo, pero si a eso le sumamos estar a tope durante tantos días para entrenar, termina por desgastarte mentalmente y eso hace que no disfrutes de lo que haces en ese momento porque otras cosas ocupan su lugar.

Las semanas pasan, guiadas por nuestro Trainer (Julián), que se preocupa en todo momento por nuestra evolución, una a distancia y otra “in situ”, y poco a poco las horas de dedicación, sufrimiento, agonía… van dando sus frutos, que esperemos que sea máximo dentro de 12 días en la línea de salida de Campeonato Mundial XTERRA.

Para caer bien en la isla hawaiana deberemos aprendernos esta frase: “Maui No Ka Oi” que dice algo así como “Maui es lo mejor”